Hasta el próximo 31 de marzo estarán abiertas las inscripciones para que jóvenes colombianos de diferentes denominaciones o tradiciones cristianas hagan parte de la cuarta edición del Laboratorio de Buenas Prácticas Ecuménicas e Interreligiosas conocido como Ikuméni. Se trata de un programa que busca formar liderazgos participativos y comunitarios, en torno a la promoción del desarrollo y la ecología integral; construcción de paz; respuesta a los asuntos humanitarios y resiliencia comunitaria.
El espacio pedagógico que, en esta oportunidad, se desarrollará del 16 de mayo al 15 de septiembre (16 semanas) a través de encuentros sincrónicos y un encuentro presencial, cuenta con el apoyo de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), a través del Departamento para la Promoción de la Unidad y del Diálogo. Además, la participación será certificada por el Centro Bíblico Teológico Pastoral para América Latina y el Caribe del CELAM y la Corporación Universitaria Reformada.
En Ikuméni, mediante diferentes módulos y estaciones temáticas, jóvenes cristianos con edades entre los 18 y los 35 años, de diferentes países de América Latina y el Caribe, podrán interactuar entre sí para intercambiar experiencias, establecer lazos de fraternidad y conocer nuevas dinámicas de cooperación inter- eclesiástica e interreligiosa. De acuerdo con el programa, recibirán formación de tipo experiencial, espiritual y comunitaria, con un énfasis especial en herramientas de liderazgo. Metodología que les permitirá diseñar propuestas sobre buenas prácticas que pueden aplicar en sus comunidades de origen.
Tomado de: Conferencia Episcopal de Colombia
“Lo que me llevo de mi experiencia en Ikuméni, es aprender a tener una escucha profunda, atreverse a apagar mis juicios internos, las ideas preconcebidas, donde dejé de lado todo lo que he ido aprendiendo para de verdad conectar con lo que está compartiendo mi compañero; y el resultado es a veces impresionante, porque yo he llegado con una idea de solución pero cuando me atrevo de verdad a escuchar al otro se replantean las ideas e inclusive pueden salir nuevas ideas. Ha sido súper enriquecedor compartir con mis compañeros de todo centroamérica y latinoamérica», así lo expresa Lucero Jaque, joven católica de Lima, Perú.